Panecillos de centeno “tipo hamburguesa”






Tenía ganas de hacer panecillos de hamburguesa, pero quería hacer algo especial, más integral. El otro día me gustó mucho cómo quedo el pan de centeno, así que decidí hacerlo con una mezcla de centeno y trigo. Puse huevo, leche de soja y margarina, para que quedaran blanditos. Utilicé los panecillos para hacer unos bocadillos de pollo barbacoa. En mi casa, nos encantaron a todos.

Yo use la máquina de pan para amasarlo. Después di forma a los panecillos y los horneé. También se puede amasar a mano o en Thermomix. 


Ingredientes:
250 g harina de trigo de fuerza
250 g harina de centeno
Un sobre de levadura rápida de panadero (o una nuez de levadura fresca)
Una cucharada de azúcar 
200 ml de agua tibia
100 ml de leche de soja (o de vaca)
1 cucharada de margarina (o mantequilla)
1 y ½ cucharadita de sal
Un huevo ligeramente batido




Echamos en el recipiente de la máquina de pan el agua tibia, la leche, la margarina, el azúcar y la levadura. 




A continuación las harinas, el huevo y la sal.  




Seleccionamos el programa para amasado.




Si lo queremos hacer a mano o en Thermomix, disolvemos primero la levadura con el agua tibia, la leche, la margarina y el azúcar. Esperamos 5 minutos antes de empezar el amasado. Para ello, ponemos las harinas y la sal en un bol, echamos los líquidos y el huevo en el centro y amasamos hasta tener una masa uniforme. La dejamos reposar media hora en un lugar templado, cubierto el bol con papel film. 

Una vez lista la masa, hacemos una bola, amasando con un poco más de harina si ha quedado muy pegajosa.




Dividimos en ocho trozos (aproximadamente de 100 gramos cada uno).




Les damos forma de bola. Yo deje las bolas irregulares, porque así me gustan más. Tienen un toque más artesano. Los colocamos en una bandeja de horno cubierta de papel de hornear. 




Los dejamos crecer veinte minutos o media hora en un sitio templado. Yo lo hago en el horno a 30º, poniendo en la bandeja de abajo un poco de agua, para crear un ambiente húmedo.




Una vez pasado este tiempo, ponemos el horno a 220º, sin gratinador. Untamos los bollos con un poco de leche. 




Si queremos, podemos ponerles semillas de sésamo o de amapola. Cuando está caliente el horno, bajamos a 200º y los horneamos entre 12 y 15 minutos. 





















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