Pinchos de pollo Satay




 
El pollo satay es una receta del sudeste asiatico que me encanta. Yo he comido estos pinchitos en restaurantes tailandeses y, poco a poco, he ido haciendo mi propia receta. Es un poco distinta del original, en parte porque no es fácil conseguir todos los ingredientes. También en cada zona tiene sus peculiaridades.
 

Ya sabéis que me encanta la comida tailandesa. En este blog podéis encontrar toda una sección de esta cocina, bajo la etiqueta "comida tailandesa". Me gusta hacer también en casa, partiendo de especias fáciles de encontrar, todos los salsas y condimentos necesarios para elaborar los platos. De todas maneras, si os falta algún ingrediente, experimentad con lo que tengáis. Seguro que el resultado es buenísimo. Por ejemplo, estos pinchitos quedan buenísimos incluso marinándolos solo en salsa de soja.

En los restaurantes tailandeses la acompañan de salsa de cacahuete. En otro post os enseño la receta, que es facilísima. La salsa la podéis usar con muchos otros platos, porque está muy rica.
 
 
 
 
Es la comida favorita de mi hijo, así que suelo hacer mucha cantidad para poder hacerlo dos veces. Esta vez hice ¡2 kilos de pechuga!, pero yo os dejo la receta para menos cantidad.

Ingredientes:
500 g de pechuga de pollo
½ vaso de salsa de soja
Un par de dientes de ajo o una cucharadita de ajo en polvo
1  cucharadita de zumo de limón
½  cucharada de cúrcuma
½ cucharada de jengibre
Una cucharadita de azúcar moreno (si no tenéis, podéis usar miel)
Palitos de bambú (opcional)




Se corta la pechuga en trocitos como de 2x2 cm.
 
 
 
 
Echamos los trozos de pechuga en un recipiente hermético con tapa, que podamos meter en la nevera (un "tupper" o similar).
 
 
 
 
Mezclamos todos los ingredientes para hacer una salsa con la que marinar la carne.
 
 
 
 
Se echa el aderezo en el recipiente con la pechuga.
 
 
 
 
Se mezcla bien y se deja marinar un  mínimo de 2 horas en la nevera, aunque puede quedar más de un día. Cuánto más tiempo lo dejemos, más sabor y color cogerá.
 
 
 
 
Cuando vayamos a cocinar los pinchitos, cogemos los palitos de bambú que vayamos a usar y los humedecemos con un poco de agua. Esto lo hacemos para que no se quemen. Yo usé unos palitos más cortos y anchos que encontré y me gustaron mucho. Normalmente uso unos palitos finos y alargados, que venden en muchos sitios. Si no tenemos palitos, no pasa nada. Podemos hacer la carne a la plancha en trocitos.
 
 
 
 
Se ponen los trocitos en palitos de bambú, entre 3 y 5 trocitos en cada palito (depende del tamaño del palito y de los trozos de pechuga).
 
 
 
 
Se doran en una sartén untada de aceite. A la hora de dorarlos primero ponemos el fuego fuerte, para que cojan color, y después al mínimo para que se haga bien la carne por dentro.
 
 
 
 
Cuando están bien hechos, los sacáis.
 
 
 
 
Los podéis poner con arroz tailandés y ensalada de lechuga. También con otros platos de comida tailandesa. Si preparáis un poco de salsa de cacahuete tailandesa, el resultado es espectacular.




(Receta revisada el 4 de marzo de 2013)

Comentarios

  1. Gracias Festín por esta receta tan buena, con un poco de arroz basmati me quedó deliciosa y es tan fácil!!

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  2. He actualizado la receta, espero que te guste.

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  3. Qué buena y qué fácil. Nos ha encantado!

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